Este estudio comparó la coagulación preoperatoria en pacientes con válvula aórtica bicúspide (VAB) frente a válvula aórtica tricúspide (VAT) sometidos a cirugía aórtica torácica, sin encontrar diferencias importantes en las pruebas ROTEM o convencionales de coagulación. Aunque los pacientes con VAT necesitaron más transfusiones, esto se atribuyó a factores de confusión más que a la morfología de la válvula, lo que indica que no es necesario ajustar el tratamiento de la coagulación en los pacientes con VAB.